El patrimonio histórico desempeña un papel fundamental en la construcción y preservación de la identidad cultural de los pueblos. A través de él, las sociedades reconocen sus raíces, valores y evolución a lo largo del tiempo. Además:
- Fomenta el sentido de pertenencia y cohesión social.
- Sirve como herramienta educativa para conocer la historia y diversidad cultural.
- Impulsa el turismo cultural, generando beneficios económicos.
- Contribuye al diálogo intercultural y al respeto por otras culturas.
- La pérdida de patrimonio supone un empobrecimiento cultural que afecta tanto al país afectado como a la humanidad en su conjunto.




